Sistemas de aire acondicionado de confort están diseñados para la comodidad de la gente, no la protección de sistemas eléctricos basados en computadoras. A diferencia de la gente, los equipos generan calor seco (sensible), pero no la humedad. Solamente cerca de 60-70% de la capacidad total de un sistema de confort se dedica a la extracción de calor sensible, mientras que un 30-40% para la deshumidificación. Con un gran porcentaje de su capacidad total dedicado a la eliminación de la humedad, sistemas de confort pueden reducir la humedad del ambiente muy por debajo de los estándares aceptables. Un sistema de confort más grande es necesaria para obtener la misma capacidad sensible como un sistema de enfriamiento de precisión.